Tenemos que tener bien en claro que la piel de la cara está expuesta a lo largo del día a la contaminación ambiental, a esto le tenemos que agregar que usualmente utilizamos maquillaje para cubrir imperfecciones o para vernos más guapas. Los poros estarán tapados durante todo el día favoreciendo a que la grasa natural de la piel quede retenida en el interior, pudiendo aparecer lesiones como los puntos negros (comedones) o quistes de retención.

Aquí dejamos en claro la importancia de llevar a cabo una buena limpieza de la piel a diario.

Cómo realizar una limpieza facial correcta

Limpiar bien el rostro o la limpieza facial, puede garantizarnos una belleza natural, pues elimina impurezas y deja la piel mucho más saludable. Tenemos que dejar en claro que no se aconseja la realización de una limpieza facial cuando hay espinillas inflamadas con un puntito amarillo y base roja.

Es importante pero no indispensable, intentar no exponernos al sol 48 horas antes y después del tratamiento para evitar que la piel sea manchada. Siempre tenemos que usar protector solar y beber bastante agua para mantener hidratada la piel.

Pasos para lavarse la cara correctamente

1. Desmaquillar

Si pretendes limpiar tu rostro en la noche antes de dormir, este es el primer paso y más importante. Tenemos que eliminar los restos de maquillaje, la polución y la grasa que nuestro cuerpo segrega, pues se van acumulando en la superficie del rostro e impiden que luzca bien.

Es esencial eliminar el maquillaje (visita nuestro apartado de desmaquillantes y como elegir el adecuado).

2. Vaporizar

Utilizar vapor del agua caliente durante 10 o 15 minutos ayudará a abrir los poros para la posterior limpieza de estos.

No es fundamental pero contribuirá a que la retirada de imperfecciones sea más fácil y menos molesta.

3. Exfoliar

Para esto utilizaremos un poco de exfoliante en una bola de algodón y realizaremos minuciosamente movimientos circulares en toda la piel del rostro.

Nos concentraremos en áreas como la frente, cejas y laterales de la nariz, pues en estos lugares se acumula más la suciedad. Este es un paso importante para nuestra correcta limpieza facial.

4. Limpiar la piel profundamente

Retiraremos los puntos negros con nuestros dedos. Cubriremos nuestros dedos con una gasa y oprimiremos los lugares donde se encuentren la mayor cantidad de puntos negros en nuestro rostro.

Eliminaremos con las manos las imperfecciones que el exfoliante no pudo quitar.

5. Mascarilla

Tras esta larga limpieza, aplicaremos una mascarilla calmante que ayuda a la piel evitando el enrojecimiento. La mascarilla puede ser realizada con productos especializados o caseros.

6. Proteger la piel

Por último, aplicaremos una fina capa de crema hidratante con protector solar para calmar y proteger la piel.